En el popular grupo de Facebook Chalmeros de corazón, un usuario compartió recientemente una experiencia desagradable durante su visita al parque del Ahuehuete en Chalma. El testimonio ha generado comentarios y reacciones entre los peregrinos que, año con año, visitan este lugar sagrado.
Según relata el visitante, luego de más de 15 años viniendo en peregrinación, fue sorprendido por una cuenta excesiva: $880 pesos por 5 quesadillas y 2 tacos, todos de tortilla normal, sin refrescos ni otros complementos. La comida fue adquirida en un local ubicado frente a las letras de «El Ahuehuete», el cual —según su descripción— se identifica fácilmente por tener una pantalla grande y estar atendido por una señora con corte de cabello tipo masculino.
¿Qué pasó en El Ahuehuete, Chalma?
El peregrino admite no haber preguntado el precio antes de ordenar, un error común cuando se confía en la tradición de trato justo que caracteriza a la mayoría de los comerciantes de Chalma. Sin embargo, denuncia que el cobro fue excesivo e injustificado, especialmente considerando que muchos peregrinos viajan con lo justo para su recorrido de fe.
También mencionó que prefirió no reclamar debido a la actitud de la vendedora y los comentarios que ha escuchado sobre que en esa zona algunos comerciantes pueden reaccionar de forma agresiva o prepotente.
Recomendaciones para peregrinos y visitantes
-
Pregunta siempre los precios antes de consumir, especialmente en zonas turísticas.
-
Si algo no te parece justo, trata de resolverlo con respeto, pero no dudes en reportarlo si es necesario.
-
Lleva contigo una cantidad fija de dinero y trata de consumir en locales que ya conoces o que tengan buenas referencias.
- Consulta nuestras recomendaciones sobre lugares seguros para comer en Chalma
Chalma es más que una mala experiencia
Es importante recordar que la mayoría de los comerciantes en Chalma son personas honestas, que atienden con calidez a los miles de visitantes que llegan cada año. Este tipo de casos deben visibilizarse para prevenir abusos, pero también debemos seguir fomentando el respeto y la buena convivencia entre todos.
¿Te ha pasado algo similar en tu visita a Chalma o El Ahuehuete?
Compártelo en los comentarios o escríbenos para incluir tu historia en una próxima nota.
